Muchos fármacos afectan a la capacidad para conducir. Los que se utilizan para el dolor crónicos (afecta a uno de cada tres españoles, pero sólo una cuarta parte acuden auna unidad especializada para su tratamiento) y lo que se toman para otros problemas, producen efectos secundarios y alteraciones que afectan muy directamente a las capacidades del conductor. somnolencia, visión borrosa, agitación sedación o pérdida de reflejos.
Los medicos informarán al paciente-conductor de los peligros de:
º Algunos fármacos con efectos secundarios y alteraciones para conducir.
º Automedicarse.
º La mezcla con alcohol o drogas.
º Conbinar fármacos para el dolor con antihistamínicos o codeína para las alergias, catarros gripes.
º Al iniciar el tratamiento, añadir otro tratamiento o si se cambia la dosis.
º Interrupción brusca del tratamiento para el dolor crónico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario